andreamarinm
Olvidar es diferente a dejar ir. Olvidar es borrar, ¿quién quiere olvidar lo vivido? Si en verdad olvidáramos nuestra vida sería el círculo del eterno retorno. Dejar ir nos lleva a un crecimiento interno, a un aprendizaje. Dejar ir nos eleva a un nuevo nivel de consciencia. Olvidar nos mantiene en la ignorancia. Los recuerdos son mi más grande tesoro. No quiero olvidar.
Es un patrón que no se limita a la industria textil sino que pernea en el razonamiento humano limitándolo a desarrollarse dentro de un área específica. Todo lo que salga del cuadrado preestablecido tiene una connotación negativa. La gran pregunta es quién delimita esta área, ¿tú o la sociedad por mera convención? Atrévete desarrollar pensamiento asimétricos.
Montar algo. Puedes montar lo que sea. Pero montar una escena.... son palabras mayores. Una escena de celos, la más común y socorrida. ¿Para qúe? ¿Qué se gana montando una escena así? Al final se pierde más montando que hablando.
Estoy cansada que todo sea un recorrido para regresar a lo mismo: un pretzel. Por más enredado que esté, es una copia más. Quiero variedad, diversidad, aventuras, sueños nuevos. Arriesgarme a vivir diferente, a ser diferente sólo por haberte salido del molde preestablecido. A vivir mi vida como quiero y como sueño, sólo quiero ser yo.